Vistas de página en total

7/12/09

La rosa de Hel

Este poema es inquietante, pero os ruego, tratarlo como una curiosidad, un volver la vista atras y retomar los temas de los antiguos romanticos, un ir en contra de lo normal y hundirse en lo macabro...

Rosa marchita
del jardin de Hel,
amante complaciente
aun en tu óbito.

En largas horas
ansío tu cuerpo
aunque quieta
se que me esperas

y por las noches
de nuevo disfruto
de tu cuerpo
aún incorrupto.

Macabra sonrisa
de tus labios estirados
cuando los beso,
fríos e inermes.

Como gozo aún ahora
de tus placeres,
y aunque fria e inmovil,
te sigo amando.

y siempre deseo
tenerte otro dia mas
y quedarme contigo,
mi rosa marchita.

No hay comentarios:

Publicar un comentario